CHIHUAHUA, Chih., (apro).- El gobernador César Duarte afirmó que el caso de la activista Marisela Escobedo es un tema cerrado para la Fiscalía General del Estado (FGE) y, por tanto, él no entrará en discusiones estériles.
Duarte insistió en que la familia de la activista, ejecutada en diciembre de 2010, está interesada en que el caso no se aclare, y más bien –agregó– parece que es una venganza entre ellos.
En respuesta al hijo de Marisela Escobedo, Juan Frayre, quien presentó la fotografía de Andy Barraza, hermano de Sergio Barraza Bocanegra –autor material del homicidio de Rubí, hija de la activista–, indicó que si tiene pruebas que las presente.
“Si ellos tienen mayores pruebas que las presenten, no tenemos ningún problema en ese sentido. No nos parece prudente no abonar a que los asuntos se esclarezcan, sino que simple y sencillamente se mantengan en un estatus de duda, eso es lo que de ninguna manera podemos permitir”, expresó.
Añadió:
“Polemizar más en un asunto que quedó ya tan claro para la Fiscalía y sobre todo por la manera en la que se le consignó al asesino (Enrique Jiménez Zavala, El Wicked), es una discusión estéril que no abona”.
Fuente: Proceso
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