Humberto Moreira aseguró que nunca ha hecho nada fuera de la ley (Foto: Isaac Esquivel/Cuartoscuro) |
DATO: En la pagina fuente esta un audio para quienes gusten escucharlo.
Humberto Moreira Valdés, exgobernador de Coahuila y ex presidente nacional del Partido Revolucionario Institucional, habló en entrevista con el diario coahuilense Vanguardia sobre lamuerte de su hijo José Eduardo Moreira Rodríguez, ocurrida el pasado 3 de octubre y de la que responsabilizó a los “cerdos” que se han hecho millonarios por sus vínculos con el narcotráfico y dijo no tener miedo de ellos.
Expresó que por esa muerte también tienen que pagar “estos cerdos que se codean con la sociedad, que se han hecho millonarios a partir de su trato con narcotraficantes. Son igual o más responsables por andar entre la sociedad dándose golpes de pecho y son los que financian a los cárteles. Yo los quiero ver a ellos en prisión. A esos cerdos que se la dan de santones aquí en el pueblo, en el estado. A esos no les tengo miedo”.
La entrevista fue hecha en dos momentos (en su casa el 9 de octubre y vía telefónica el 24 de octubre) y reservada “hasta que se dieran las condiciones de su publicación”, según el diario. Hoy se publicó la primera parte de dicha conversación, en la que el exgobernador dice que quiere justicia, no sólo por la muerte de su hijo, sino por las miles que ha dejado el combate del gobierno federal contra el narcotráfico.
Expresó que tan culpables de esas muertes son quienes las han ejecutado, como quienes financian a los narcotraficantes.
También aprovecha para anunciar que pronto aclarará el tema de la deuda pública en Coahuila, con “elementos claros de responsabilidad” y asegura que no tiene pensado salir del país. Asimismo, afirma que nunca ha hecho nada fuera de la ley ni ha tenido nexos con el crimen organizado, ni ha recibido ofrecimientos o amenazas de éste.
A continuación presentamos completa la primera parte de la entrevista:
‘Deben tener temor al castigo de Dios’: Humberto Moreira/ Vaguardia
25 de octubre de 2012
PRIMERA PARTE
Saltillo.- En su trinchera más íntima, en medio de la desgracia de un hijo asesinado por el crimen organizado, Humberto Moreira Valdés, exgobernador de Coahuila y exlíder nacional del PRI, exige justicia, no venganza, y en las páginas de VANGUARDIA vuelca en palabras sus sentimientos: desde la devastación emocional tras la muerte de José Eduardo, hasta la necesidad de defenderse ante lo que él considera una campaña de desprestigio en su contra. Aquí su indignación en letras:
Se acaba de dar a conocer la información de la muerte de Heriberto Lazcano ¿Qué significa para usted?
En esta situación trágica y dolorosa, uno lo que busca es justicia y no venganza, y yo confío en que las autoridades federales y estatales vayan deteniendo no solamente a quien mató a mi hijo, lo dije claramente porque así lo creo; en el momento de más dolor se sale del corazón lo que tú sientes, y lo que yo creo es que es uno de muchos muertos que ha habido en este proceso de guerra que ha vivido el País; obviamente a mí me duele muchísimo el mío, pero me duelen todos también. Se han muerto muchos mexicanos de manera trágica.
Me ponía a pensar cuando estaba en estos días, sin poder levantarme, y le preguntaba a Dios por qué me pasó esto, y también me respondía: “¡Cuántos padres o madres de familia ni siquiera han visto el cuerpo de sus hijos porque los han desaparecido!” ¿Qué representa esto? es parte de lo que tiene que estar haciendo el Gobierno Federal, Estatal, los municipales también.
Sin embargo el principal acusado, el “Z-40”, está libre…
Es responsabilidad del Gobierno detenerlo. Yo confío en que lo van a hacer, pero no nada más a él, sino que se haga una investigación de aquellos personajes, muchos que… forman parte de la sociedad y son hasta reconocidos algunos y que tienen relaciones financieras con ellos o que han hecho sus fortunas a través de vincularse con ellos, por consiguiente son co-responsables de la muerte de mi hijo y de los 80 mil o 100 mil… -ya ves que las cifras no se sabe cuál es, hasta 150 mil manejan-, finalmente de los miles de muertos de esta guerra.
Esos personajes que yo sé que tienen relación financiera con ellos, y si tienen relación financiera es que les permite a ellos comprar armas, y si les permite comprar armas les permite matar gente. Entonces pues tan culpable es el que ejecuta esas cosas, son los narcotraficantes, como esas personas que tienen vínculos de tipo financiero y que están en la sociedad, dentro de la sociedad.
Gente que se hace pasar como “bien” y que asume posiciones luego de autodefensa para no ser descubiertos. Mira, cuando te pasa algo como lo mío, ya las aspiraciones políticas, esas cosas, quedan en un quinto plano, pasan a un tema no relevante para uno; lo que quiero es que se haga justicia, como todos los padres, no nada más a mi hijo, que quede bien claro, de todos.
Sería el inicio para que busquen en cada estado ¿quiénes han tenido relaciones con ellos? y es gente que, insisto, asumen posiciones críticas luego hacia al Gobierno para poder tener una protección viéndose como “demócratas”, como “opinólogos”… es gente de lo peor.
Personajes de la “sociedad” que han pasado de tener un mediano ingreso a ser ahora muy ricos y además no lo esconden… esto ha permeado en círculos sociales.
¿Teme represalias del crimen organizado?
Son dos caminos: uno tiene que ver con los criminales, los gatilleros, los sicarios, a ellos tienen que detenerlos las autoridades, no matarlos, detenerlos, que purguen su condena. Yo cuando fui Gobernador propuse la pena de muerte, la autorizó el Congreso Local, no la autorizó el Federal, pues no se hizo; si no se hace, entonces hay que detenerlos, que lleven un juicio, que los procesen, pero ese es un camino.
¿Yo cómo desarrollé mi Gobierno? Lo desarrollé en materia de seguridad, además era el estado que más disminuyó la pobreza, datos de Coneval. Es el estado que más generó empleos, hay 70 mil coahuilenses que le deben su empleo al Gobierno que yo encabecé, que le deben su empleo; se generaron incentivos millonarios en las empresas en terrenos, en infraestructura de gas, de luz, para que llegaran. En combate a la pobreza, pues allí están las obras; en Educación, fui el que más aulas construyó, en fin.
En el tema este de la deuda, que también voy a salir a aclarar, ¡eh!, con elementos claros de responsabilidad de quienes hayan hecho ese problema. Pero en el tema de Seguridad, ¿cómo le hice?…
Se dice que usted dejó crecer al crimen organizado en Coahuila.
Lo dicen los “opinólogos” que sin saber siempre hablan, y a quienes yo les deseo como hombre creyente, que Dios los perdone. A ver ¿qué fue lo que hice yo? Hablé con el general (Guillermo) Galván, en quien yo confío, el Secretario de la Defensa Nacional, yo confío en él y en su momento le dije: “A ver General…”, era en esos momentos cien por ciento federal el tema (del narcotráfico) cuando yo fui Gobernador, las Policías estatales y municipales eran coadyuvantes, ayudaban con los miserables recursos que les llegan a los estados porque el Gobierno Federal se queda con todo —y lo denuncié cinco años y a ustedes les consta—, de cada Peso regresan poquitos centavos a los estados, y más a un estado como Coahuila, que genera tanta riqueza.
Fui con el General, le dije: “Écheme la mano, ayúdeme”, es un tema que en esos momentos era federal, pero que además yo sí quiero ayudar, y me hizo favor de proponerme militares, casi todos ellos retirados, para que nos ayudaran a enfrentar este problema; es decir, gente que ha estado formada en el Ejército y que tiene el valor, los conocimientos, las agallas, las habilidades para poderse hacer cargo de esto.
¿Fue correcto, no fue correcto? Bueno, yo acudí con los militares, que es en quien yo confío y ellos se hicieron cargo. Si mal no recuerdo fueron 17 jefes de Seguridad entre los que estaban en la Policía Judicial, en la Investigadora, entre los jefes de Policía Municipales, esto del “Mando Único” que tanto se cacareó, y que por ineficiencia e ineficacia de aterrizar las políticas públicas no se generó, en este estado fue en el único que se generó.
Prácticamente había Mando Único, dependían de un General aquí, y ese General mandaba a los generales de los municipios. Así se hizo cuando yo estaba y enfrentamos con valor, creo yo que con inteligencia y con muchísimos recursos la operación del plan (Modelo) Coahuila.
Nos ayudó Isabel Arvide, si lo recuerdan. Entraron los generales, yo me reunía con ellos, lo pueden decir ellos, y les decía: “El único favor que les pido es que a mí no me comenten qué van a hacer, porque yo no tengo nexos con nadie que ande en esto, entonces ustedes tienen toda la libertad de actuar. Sólo les pido una cosa: hay que respetar los derechos humanos y hacer todo para que no haya balaceras en las calles, que la gente de bien que no se mete con nadie no sufra estos acontecimientos”.
Hubo reuniones con el Gobierno Federal en Torreón, con los empresarios de Torreón, y ellos lo pueden recordar; recuerdo una fue en casa de don Luis de la Rosa, que es el director del grupo GREM, donde le pedimos al entonces secretario de Gobernación, a quien yo aprecio mucho, a Fernando Gómez Mont; y le reconozco su valor como ser humano y como hombre; y le pedimos que fuera el portavoz del deseo de los habitantes de La Laguna de que llegaran Fuerzas Federales.
Siendo Gobernador, ¿recibió alguna amenaza, ofrecimiento, algún intento de acercamiento o nexo del crimen organizado?
¿Con qué?… no, ninguna, claro que no. No sé si a ti, pero a mí no.
Ni recibí ni amenazas, ni ofrecimientos ni acercamientos. Mi relación en el estado es muy cercana a la gente. Yo incluso no quería traer seguridad, lo dije muchas veces: “En mi equipo traigo seguridad no para que me cuiden, si no para que no se me acerquen los ‘malos’ a querer tener alguna relación conmigo”, porque como nunca le he hecho daño a nadie, nunca temí que me pasara algo.
Aquí la gente me conoce lo que he hecho siempre, y mi alianza para poder llegar a gobernar fue con los pobres, en quienes creí, creo y siempre creeré. Es con ellos, recuerden ustedes cómo vencía electoralmente yo a mis adversarios, con una alianza con el pueblo y con los pobres. Yo no andaba en reuniones “rococó” ni nada, y los aplastaba electoralmente, cuatro a uno, cinco a uno, luego ya en las contiendas constitucionales tres a uno, o dos a uno, pero era una alianza clara con los pobres, en quien yo creo.
Peleé en esta guerra yo, y se los dije muy claro, nada más que la memoria es muy corta, la segunda vía que yo planteé (en contra de la inseguridad) fue la Educación; fui el Gobernador que más escuelas abrió, recuerden que la tercera parte del estado tenía preparatorias, las dos terceras partes no tenían preparatorias, yo las abrí. Con el deporte, recuerden todo el esfuerzo de las áreas recreativas: el Bosque Urbano, aquí el Ojo de Agua Bella Vista; los parques que hicimos, El Chapulín. Era abrir espacios de recreación.
Los empleos, que en esta historia de este estado no hay un Gobernador, con respeto a don Óscar (Flores Tapia), que haya generado tantos empleos como yo, no hay ninguno. Generó muchos Rogelio Montemayor, abrió la puerta al crecimiento Flores Tapia, pero el gran generador de empleos en el estado fui yo.
¿Advirtió a la Federación sobre el crimen organizado en Coahuila?
No solamente lo advertí, le di información concreta durante mucho tiempo. A quien yo reconozco (PGR) que hicieron un trabajo siempre atentos a las necesidades del Estado, sería injusto de mi parte no reconocer que la PGR estuvo atenta siempre a cualquier necesidad de información que se requería en ese momento, a cualquier auxilio que se necesitaba… eso hay que reconocerlo, independientemente de mis diferencias políticas con el Gobierno Federal, tengo que reconocer que la PGR actuó siempre apoyando a la Procuraduría General de Justicia del Estado, siempre; como el Ejército también, y como veo ahora como exgobernador que lo hace la Marina también y que están apoyando al actual Gobernador.
Dice que usted sí advirtió a la Federación ¿cuándo fue?
Muchas veces; cuando matan al reportero Valentín (Valdés), no solamente lo advertí, hice un gran reclamo… que me partió el corazón, y ahora comprendo el dolor de su madre, lo hice con toda energía, reclamé lo que le había pasado a Valentín, y que me dolió a mí como si hubiera sido… porque él cubría mi fuente y además por su condición física, él delgadito, bajito, que no se metía con nadie, me dio más tristeza todavía el saber que lo mataron y la forma en que lo mataron.
Pero si te refieres a que llevé información precisa, llevé todo. Te voy a decir por qué dejé de ir a Monclova a la casa donde yo vivía; ya ves que me fui un tiempo a vivir, que ahora iban a tener un Gobernador que vivía en Monclova, y se los digo a todos los monclovenses: “Yo me aparté de allí porque el mismo Ejército me alertó, y (José Luis) Santiago Vasconcelos, quien murió en aquel accidente con (Juan Camilo) Mouriño, él me advirtió que debería salirme de esa colonia, porque cerca de ahí iban a hacer las detenciones de narcotraficantes que hasta hace poco han detenido, ¡eh!
Por eso dejé de ir a Monclova a vivir donde yo vivía. Me dijo: “Salte de eso, es una zona de peligro”; me salí de ahí y ellos iban a actuar en cualquier momento, luego vino la muerte de José Luis y ya pasó el tiempo.
A lo que voy es que no solamente estaban alertados de mi parte, sino que dejé la responsabilidad de la seguridad en quienes yo confío, que es el Ejército Mexicano, y quiero decir que lo hicieron bien. Lo hicieron desde mi punto de vista bien.
¡Oye, que vivía en Coahuila “El Lazcano”! Pues sí, dicen que vive en todas partes, que estaba en Tamaulipas, que estaba en San Luis, que estaba en Hidalgo -porque es originario de Hidalgo-, que estaba en Coahuila, que estaba en Zacatecas…
Dicen, dicen, dicen, dicen… Lo que sé yo es que cuando puse en manos de los militares (la seguridad de Coahuila) funcionó, y creo yo que el actual Gobernador, Rubén, está haciendo su trabajo y tiene que enfrentar el crimen organizado.
¿Qué impresión le deja Jesús Torres Charles?
Fue un hombre que se coordinó con los militares, un hombre en el que yo confié y confío, que hizo bien su trabajo; un hombre que dio resultados, había detenciones importantes aquí, un hombre que en todo momento estuvo trabajando en coordinación con la Procuraduría General de la República.
Ha evaluado salir del País o que sus hijos salgan por protección o de manera momentánea?
Es algo que tenemos que evaluar aquí en la casa, yo tengo amigos gobernadores que me han invitado a ir a sus estados, que me vaya a pasar unos días, mi compadre, Miguel Rincón,que me vaya con el; mi compadre (Juan Francisco) Ealy, lo que sucede en estos momentos tan tristes con la gente que te quiere y te invita a que vayas con ellos.
¿Irme del País? A mí me gusta mucho México, y después de México me gusta Cuba y es algo público, porque creo en la valentía y en la capacidad y en el talento y ese valor que tienen los cubanos, y me gusta mucho Cuba.
¡Por eso, esas historias de que yo vivía en Cuba!… Aquí estaba yo, en la casa. El que nada debe nada teme. Yo fui a Cuba 10 días nada más cuando dejé el partido (dirigencia nacional del PRI)… fui a sanar las heridas a un lugar que yo quiero y donde me quieren, y donde además hay una profunda admiración de mí hacia su lucha revolucionaria.
No, no he pensado salir del País. Una de mis hijas es ciudadana americana y estamos pensando qué hacer. Ahorita lo que estoy esperando, estoy observando, es que se cumpla la Ley, como 80 mil padres más, o 100 mil padres más, que estamos esperando eso en este País.
Yo nunca he hecho daño a nadie; nunca he hecho nada fuera de la ley y lo voy a demostrar en la parte esa de la deuda muy pronto, pero en ningun sentido he hecho nada fuera de la Ley. Propuse la pena de muerte legalmente, pude haber omitido eso y proponer que ilegalmente se hiciera; cuando dijeron que no, que le sacaban a ese tipo de decisiones me hice a un lado.
¿Hay alguna lección que le haya dejado José Eduardo?
Muchas. Tratar de ser muy prudente, él me trataba siempre de calmar. El profundo compromiso con su pueblo natal, con Acuña. Era él que siempre me avisaba cuando mis otros hijos llegaban tarde. Un día (uno de ellos) se puso un, ¿cómo se llama?, ¿de los que se ponen aquí?, uno de esos piercing, entonces vino a decirme.
Él fumaba como yo, y nunca fumó enfrente de mí… respeto. No tomaba, pero sí se echaba un cigarrillo, y entonces de repente se me perdían ¿Dónde quedaron?… pues yo sabía que se había echado otro.
Era un hombre muy bueno ¿Qué me deja a mí? pues me deja a mi nieto, no a mí, a su madre ¿verdad?, pero a mí como responsabilidad. Como soy un hombre creyente, pero no como esos creyentes de rodilla callosa que no ha leído ni la Biblia… y luego que critican y despedazan la imagen de alguien… se la pasan dándose golpes de pecho. Yo he leído la Biblia completa, los 66 libros, no una vez, sino varias veces.
Soy amigos de los sacerdotes y de pastores por igual. Soy un hombre de fe, pues, que nunca lo oculté, porque aquí hay creyentes de clóset también, ¿no?. Hay los que: “Es que un político no debe decir…”; no me importa eso.
A mí lo que me importa es sostenerme en la fe que tengo en Dios. Buscar que haya justicia, pero sobre todo, no nada más con lo de mi hijo, a veces yo creo que mi mensaje a quienes tienen el mismo dolor que yo, mi mensaje respetuoso es: “Vayamos buscando mejor: basta de guerra y que llegue la paz”.
Insisto, no quiere decir que haya impunidad, que llegue la paz, con inteligencia, con recursos… ¡Cuánto dinero se ha ido en esta guerra! si eso se hubiera ido en escuelas y en oportunidades, sería otro el País.
Es mi punto de vista, como alguien que ahora está en la misma condición que ellos… Yo no quise ver ni las fotos de la camioneta, ahí cuando aparece muerto… el dolor es muy fuerte.
Creo que a alguien, lo que más le duele que haya vivido esto, que somos muchos en este País, es ¿Qué pasó desde el momento que lo agarran hasta el momento que lo matan? Eso te duele más que la propia muerte de tu hijo… sin saber cuáles fueron sus últimos momentos. Yo invitaría a quien quiera escuchar, a quien tiene el mismo dolor que yo, vayamos buscando que llegue ya la paz ¿no?…, ¡ya fue mucho!
Esperamos sus próximas noticias
Sí, primero mi aclaración del tema (de la deuda de Coahuila) que mi hijo (José Eduardo) llevaba como mortificación diaria, que fue una bola de calumnias, de infamias. …Así como agarran al gordo ese de el (subdirector de la Policía de Acuña Rodolfo) Castillo, desgraciado que puso a mi hijo, que lo engañó, que le dijo: “Tengo una invitación que darte”, porque la esposa es dirigente de una colonia y mi hijo andaba siempre en las colonias en las loterías y en todo, en las fiestas de las colonias, de los barrios, en las colonias populares… así como ese desgraciado tiene que pagarla el resto de su vida en la cárcel, así también estos “cerdos” que se codean con la sociedad, que se han hecho millonarios a partir de su trato con los narcotraficantes.
Son igual o más responsables por andar entre la sociedad aquí dándose golpes de pecho y son los que financian a los cárteles, yo los quiero ver a ellos en prisión. A esos “cerdos” que se las dan de santones aquí en el pueblo, en el estado.
A ellos no les tengo miedo. Ellos le deben de tener miedo y terror y temor al castigo de Dios.
- Mañana: ¿Por qué Rubén no fue al funeral de Lalo? / Su nuera Lucero acusó al Gobernador.
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