Javi Poves, defensa central del Sporting, rescinde su contrato y cuelga las botas con 24 años asqueado de un deporte que cree envilecido por el dinero
Javi Poves podría seguir ganándose la vida en el fútbol y con mejores ingresos que la mayoría de la gente de su edad, 24 años, pero la pasada semana decidió armonizar sus ideales y su vida. Poves, que jugó dos temporadas en Segunda División B con el filial del Sporting de Gijón y debutó en Primera en la última jornada de la pasada Liga, resolvió sus contradicciones de forma drástica: "¿De qué me sirve ganar 1.000 euros en vez de 800 si sé que se obtienen con el sufrimiento de mucha gente?"
Un puñado de detalles pusieron al entorno de Poves en la pista de la decisión que acaba de tomar. Los compañeros de equipo se sorprendían al ver cómo el defensa central se entretenía en los viajes y las concentraciones con libros como El capital, de Karl Marx, o Mi lucha,de Adolf Hitler. En las oficinas del club también se sorprendieron cuando pidió que anulasen el ingreso de su nómina por transferencia bancaria para que no se especulase con su dinero o cuando devolvió las llaves del coche que una firma comercial entregaba a los futbolistas del primer equipo porque con el suyo, un Smart, le bastaba.