Bajo las acusaciones de sedición, motín, ataques a las vías de comunicación y daños en agravio del gobierno del estado, la Secretaría de Educación estatal y la sociedad, jueces de primera instancia de Acapulco y de esta capital libraron órdenes de aprehensión contra 24 miembros de la Coordinadora Estatal de Trabajadores de la Educación en Guerrero (CETEG).
De acuerdo con un informe oficial, las imputaciones contra los cetegistas están radicadas en siete causas penales, seis de ellas integradas este año y una en 2012, de las cuales tres se encuentran en los juzgados 1 y 10 en materia penal de primera instancia en Acapulco, y las cuatro restantes en los juzgados 1, 2 y 3 con sede en esta capital.
Los principales dirigentes del magisterio disidente en la entidad, Gonzalo Juárez Ocampo y Minervino Morán Hernández, cuentan con tres órdenes de aprehensión cada uno, mismas que fueron libradas a principios de marzo y mediados de abril por los jueces de primera instancia de Chilpancingo.
Según los documentos a los que Apro tuvo acceso, los delitos por los que se les acusa son: sedición, motín, daños y ataques a las vías de comunicación.
El expediente indica que la lista original de cetegistas que enfrentan órdenes de aprehensión asciende a 28, de los cuales siete son mujeres y 21 hombres.
No obstante, cuatro de ellos ya se encuentran sujetos a proceso penal: Genaro Guevara Hernández, Mauro Lázaro García, José Juárez Tlatempa y Cesáreo Rosendo Feliciano, quienes fueron detenidos hace un par de semanas y trasladados a penales de máxima seguridad, a petición del gobierno estatal.
Luego de que los cuatro cetegistas salieron bajo fianza, un juez de primera instancia les dictó auto de formal prisión, por lo que actualmente enfrentan su proceso en libertad, en virtud de que los delitos que se les imputan no son graves.
De acuerdo con Juárez Ocampo, el caso de las averiguaciones previas y las órdenes de aprehensión que enfrenta el magisterio disidente se discute directamente con el gobierno federal y se resolverá a través de “una salida jurídica con voluntad política”.
En conferencia de prensa realizada en la sede de la CETEG en esta capital, se informó que únicamente Gonzalo Juárez Ocampo y Minervino Morán tramitaron un amparo –otorgado por el juez séptimo de Distrito con sede en esta capital– para evitar que ambos sean aprehendidos.
No obstante, los 24 cetegistas deberán presentarse ante el juez que los reclama para definir su situación jurídica, pero debido a que los delitos que les imputa el gobierno de Ángel Aguirre Rivero no son graves, tienen la garantía constitucional de enfrentar su proceso en libertad bajo fianza.
La tarde de este martes, integrantes de la comisión política de la CETEG se reunieron con autoridades estatales encabezadas por Ernesto Aguirre. El sobrino y asesor del gobernador, así como el director de la Policía Ministerial, Marcos Juárez Escalera, asumieron el compromiso de suspender las órdenes de aprehensión en contra de los cetegistas para permitir que su situación jurídica se resuelva en los tribunales, informaron fuentes oficiales a Apro.
Antes, Juárez Ocampo señaló que las autoridades aún no pueden declarar oficialmente que el movimiento magisterial en Guerrero ha concluido, porque sigue pendiente a nivel local el tema de las órdenes de aprehensión y las averiguaciones previas. En el ámbito nacional, añadió, se mantienen las protestas en contra de la reforma educativa del gobierno federal.
El líder magisterial dijo que las acciones de protesta realizadas por la CETEG desde hace más de dos meses permitieron que la dirigencia nacional del magisterio disidente pudiera ser atendida en este momento por autoridades de la Secretaría de Gobernación federal, para plantear al más alto nivel de negociación las propuestas y revertir los efectos de la reforma en el sector educativo.
Por ello, anunció que se mantendrá una representación simbólica en el plantón que se encuentra afuera de la sede de la CETEG, al sur de esta capital, y que los docentes cetegistas buscarán recuperar clases para no afectar a los alumnos ante la cercanía del fin del ciclo escolar.
Juárez Ocampo también reprochó el hecho de que autoridades de Heliodoro Castillo y Quechultenango, ambos municipios controlados por la delincuencia organizada, hayan tomado la decisión de contratar profesores sustitutos.
Sobre ese punto, acusó al presidente del Congreso local, el diputado perredista Bernardo Ortega Jiménez –a quien calificó como “un personaje oscuro”– de impulsar esa medida para “quedar bien” con el gobierno estatal y generar una confrontación con el magisterio disidente.
De igual manera denunció que el gobernador Ángel Aguirre y algunos alcaldes están convocando a festejos donde habrá rifas de regalos y comida para boicotear la marcha anunciada por la CETEG en esta capital, el próximo miércoles 15, para conmemorar el día del Maestro.
Sobre la renuncia del secretario de Gobierno, Humberto Salgado Gómez, y los cambios anunciados por Aguirre Rivero en su gabinete, Gonzalo Juárez aseguró que de nada sirve reemplazar personas si el Ejecutivo no decide modificar su estilo de gobernar.
“El movimiento magisterial al que se sumaron diversos sectores sociales evidenció que el gobernador no tiene equipo y no tiene posibilidad de dar solución a los conflictos sociales”, expresó el dirigente magisterial.
Los 24 cetegistas que hasta el momento tienen órdenes de aprehensión son: Lorenzo Méndez Abarca, Alma Cristina Osorio Martínez, Anacleta Abarca Romero y Antonia Morales Vélez, quien se desempeña como dirigente en la región Centro y enfrenta tres causas penales por diversos delitos considerados como de tipo político.
También aparecen en la lista Gonzalo Juárez, Minervino Morán, Jerónimo Maurilio Morales, Román Meynardo López Pachuca, Lenin Marín Cruz, Jaime Bahena Terán, Jafet Lemus Ríos, Ángel Abarca Rendón, Lizbeth Solís Ramos y Diana Barrera Sarabia.
Asimismo, Carmen Sánchez Zetino, Gerardo Barrera Palacios, Herminio Esteban Tolentino, José Rojas Marrón, Filemón Sánchez Vivero, Víctor Cruz Barrera, Alfonso Vargas Muñoz, Reynaldo Hernández Ortiz, María Bello de Jesús y Armando Esquivel Salazar.
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