Martes 20 de Noviembre del 2012
Nota publicada en el Blog de Izquierda por Alberto Sladogna
Sigmund Freud formula sus reticencias ante el sionismo y las propuestas que implicaba e implica ese movimiento cuyas consecuencias caerán sobre otros pueblos, incluida la comunidad judía.
Tal como la leí subo esta carta ¿Por qué razón o causa realizo este acto? En primer lugar por la barbarie civilizada protagonizada hoy por el Estado de Israel contra los ciudadanos palestinos. Otra razón para publicarla es cuestionar, interrogar en su raíz el mito que hace equivalente al Estado de Israel,un estado teocrático, militar como la "representación" de "todos" los judíos; ese equivalencia provoca consecuencias al extender las críticas de las maniobras y acciones terroristas de ese estado teocrático; se las extiende a la extraña y singular comunidad, como si fuera fuese una unidad, con(o)unidad a la cual pertenezco con orgullo.
Por eso es conveniente tomar nota de las reticencias expresadas por Freud en 1930 al sionismo y su proyecto de fundar un Estado en Palestina.Su carta fue ocultaba, quizás, censurada en el movimiento psicoanalítico. Esas reticencias conciernen a la teoría psicoanalítica, en particular respecto de la llamada ley paterna, véase al respecto el sueño de Freud de una ley paterna que ordinaria según él, el deseo (cfr.Tótem y tabú...;El porvenir de una ilusión;El hombre Moisés y la religión monoteísta) Lacan tomó distancia al ubicar que hay un reverso de esa ley paterna, el goce sin medidas y sin ley (Cfr.,seminario oral de 1969/1970). Un goce que hoy sostiene varios aspectos de la barbarie civilizada, como se muestra en los crimenes contras las mujeres en Ciudad Juárez, Chihuahua y en la llamada "guerra contra el na(r)cotráfico".
La carta de Freud se mantuvo escondida desde 1930, año de su escritura. Hannah Arendt y Albert Einstein en 1948 denunciaron al sionismo y sus vecindades con el sionismo ...nazi. Esa dos cartas fueron escritas en respuesta al surgimiento del nuevo estado de Israel. La carta de Freud tiene gran valor, en la medida en que diagnostica al "huevo de la serpiente" en estado incipiente; la misiva fue dirigida a Chaim Koffler, miembro de la FUNDACIÓN PARA LA REINSTALACIÓN DE JUDÍOS EN PALESTINA (Keren Havesod).
CARTA DE FREUD:
Señor Doctor,
No puedo hacer lo que usted desea. La reticencia de mi personalidad a interesar al público es inmodificable y las circunstancias críticas actuales no me parecen las más adecuadas para un cambio de actitud.
Quien quiera influenciar al gran público debe tener algo muy sorprendente y entusiasta para decir y mi juicio sobre el sionismo de ninguna manera lo permite. Tengo los mejores sentimientos de simpatía por los esfuerzos libremente consentidos, soy fiador de nuestra universidad de Jerusalén y me alegro de la prosperidad del establecimiento de nuestros colonos.
Pero, por otra parte, yo no creo que Palestina pueda jamás devenir un Estado judío ni que el mundo cristiano como el mundo islámico, puedan un día estar dispuestos a confiar sus lugares santos a que los guarden los judíos.
Me parece que hubiera sido más atinado fundar una patria judía sobre un territorio históricamente no cargado, pero ciertamente sé que por un designo tan racional, jamás se podría suscitar la exaltación de las masas y la cooperación de las personas ricas.
Concedo también y lamento que el fanatismo poco realista de nuestros compatriotas, tiene gran parte de responsabilidad para despertar la desconfianza de los árabes.
¡No puedo experimentar la menor simpatía por una piedad sionista mal interpretada que hace de un trozo del muro de Herodes, una reliquia nacional y a causa de ella, desafía a los habitantes de todo un país!
Juzgue usted si con un punto de vista tan crítico como el mío, soy la persona que se necesita para jugar el rol de consolador de un pueblo embanderado en una esperanza injustificada.
Freud
Viena, 26 de febrero de 1930
Gracias, Alberto, por citar que la postee en facebook. Alberto, la originalidad, la primacía, me importa un bledo, pero sí cierto lazo de honestidad intelectual. No es un hallazgo mío, sino, de ¿sabés acaso que fue editada en 2004 en Clínicas mediterráneas (Nro. 70, Erés, 2004)? Nadie de nosotros tiene propiedad de los textos de Freud, pero luego de acompañar algún texto tuyo en el blog que gestiono, con la mejor disposición, a pesar de saber que traería "cola" -cuestión que no me interesa , pues creo en las aventuras intelectuales, "aventuras" en el sentido del avance de la lectura y escritura, muchos me cuestionaron. Lo sabía pero acompañé. Tampoco me importa los cuestionamientos. Pero esto, de la carta de Freud, que parece una tontera, no lo es pues me hace oler a algo que no me gusta.
ResponderEliminarNorberto Gómez