El mapa muestra a los católicosdel mundo entero. Son más de 1.200 millones.
Y aquí vienen las verdades.
-La inmensa mayoría de los católicos están concentrados enAmérica.
-El país con más católicos es Brasil, con 160 millones.
-Por idiomas, el español es la lengua más hablada entre los católicos pues si se suma España, y todos los países de Hispanoamérica, resultan más de 400 millones.
-En Estados Unidos, la minoría católica habla esencialmente español. Es decir, de 70 millones de católicos la mayoría son de origen hispanoamericano.
-En Canadá, la minoría católica es francófona.
-En Estados Unidos está creciendo el catolicismo debido a la fuerte inmigración y a su potente expansión demográfica (las familias hispanoamericanas tienen más hijos que las anglosajonas).
De modo que, si cualquier de nosotros estuviera en una reunión para elegir al pontifex maximus, ¿escogeríamos a un angloparlante? No, porque es una minoría.
¿A alguien que hablase portugués? Puede ser, pero solo abarca a Brasil y Portugal.
¿A un cardenal norteamericano (canadiense o estadounidense) que hablase español con acentoinglés o francés? Poco probable, porque en ese continente, los hispanoamericanos recelan de los anglosajones y encima proceden de las potencias dominantes.
¿A alguien que hablase perfectamente español, y con acento hispanoamericano? Seguramente, sí.
¿Un argentino? Bueno, no es que los hispanoamericanos sean una piña, pero siempre lo sentirán más ‘suyo‘ que un Papa español, norteamericano y no digamos europeo. Habla su misma lengua y es de la misma cultura.
La sangría de fieles
No fue la única razón, por supuesto. Porque aparte de ser mayoritariamente hispanohablante, esa zona atrae la atención de la Iglesia por un fenómeno nada silencioso que se está produciendo en los últimos años.
“Sudamérica abandona el catolicismo a un ritmo de miles de hombres y mujeres al día”, afirmaVittorio Messori, periodista especializado en temas religiosos (en una tribuna de opinión en El Mundo). “Hay cifras que atormentan a los episcopados de aquellas tierras: desde principios de los ochenta hasta hoy, América Latina ha perdido a un cuarto de sus fieles. ¿Adónde han ido? Entran en comunidades, sectas, pequeñas iglesias evangélicas, pentecostalistas que, mantenidas por grandes financiadores norteamericanos, están llevando a cabo el viejo sueño protestante de EEUU: terminar también en ese continente con la ‘superstición‘ papista”.
El Papa Francisco tiene pues una misión: la reconquista de América.
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