Integrantes del grupo de autodefensa Unión de Pueblos y Organizaciones del Estado de Guerrero (UPOEG) detuvieron a siete presuntos delincuentes, seis hombres y una mujer, en la zona rural de Acapulco.
Los capturados son acusados de incurrir en múltiples delitos como secuestro, violación, venta de droga y asalto.
Previamente, pobladores solicitaron la intervención del grupo de policías comunitarios que encabeza el activista indígena Bruno Plácido Valerio, al argumentar que las autoridades porteñas no hacían nada en contra de esta banda que tenía asolada a la población, indican reportes oficiales.
El hecho se registró el jueves por la noche y los detenidos fueron traslados a la sede del Sistema de Seguridad Ciudadana (SSC) de la UPOEG en el poblado de Tierra Colorada; no obstante uno de los inculpados se escapó, refieren los mismos reportes consultados por Apro.
Las personas detenidas por policías comunitarios en su segunda irrupción en la zona rural de Acapulco son: Fernando Moreno Chino, de 34 años; Javier Moreno Chino, de 27; Iván Soto Reyna, de 22 y señalado como el jefe de la presunta banda delincuencial, así como los hermanos Ángel, Juan Carlos y Jonathan Manrique Contreras, además de Catalina Nava Millán, de 37.
Los policías comunitarios sustentaron su acción en decenas de denuncias formuladas por los habitantes de Xaltianguis, donde señalan que los presuntos delincuentes tenían prácticamente secuestrada a la población y actuaban impunemente bajo el manto protector oficial.
Hasta el momento, los presuntos delincuentes permanecen en la sede de la policía comunitaria del SCC y no han sido puestos a disposición de las autoridades ministeriales, informaron fuentes oficiales.
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